Poesía al dolor


Dolor me han dicho
que tenemos que ser amigos
y cuánto antes mejor.

Hemos de mirarnos a la cara
declararnos amor.
Aunque todavía, no te haya aceptado. 

Sentir tu abrazo 
en cada fibra de mi piel,
pasar las noches contigo.

Son cosas con las que no contaba.

Llevas un año cortejándome
con esguinces de rodillas, 
contracturas y lumbalgias.

Te adueñaste subiendo, escalando
posiciones por cervicales 
y por fin la cabeza y ya fui tuya.

Mi cuerpo y alma se entregaron
al caos del dolor interminable
y dentro se apagó una luz.

El no saber qué eras y ahora
que lo sé y que te quedarás,
a mi pesar haciéndome compañía, 
hace de todo esto un amor imposible.

Aunque caminaré agarrada de tu mano
para dejar claro que no me arrebatarás
mi ser, mi consciencia. No lo consentiré.

Escribiré poesía, crearé y compartiré.
Adaptaré mi vida hasta recuperar la libertad
y te doy las gracias por hacerme valorar lo que tengo.

Tú, dolor le diste la vuelta a mi vida
y de aquí saldrá un nuevo yo.





Manuela García 29/06/2019

No hay comentarios:

Publicar un comentario