Estaban esperanzados porque podría devenir la reunión es un empleo. Se marcharon a casa tranquilos pero a la vez con mariposas revoloteando en el estómago (cosas de los nervios) Lucia le decía a Ousmane que no se hiciera ilusiones, estos días procurase no pensar, todo está en manos de la dueña del Geriátrico., que tanto llevaba el negocio de internos, como de acompañantes fuera del centro, vivían en casa, pero necesitaban ayuda externa. A esperar la llamada. Lucia se había dado cuenta que ya se besaban pero cuando iban caminando como dos amigos y existía una distancia entre ellos, no sabia a qué era debido. Cuando tuviera la oportunidad se lo preguntaría abiertamente. Él se había integrado bien en la comunidad- sociedad dijéramos. Hablaba español, algo de catalán de hecho había exámenes en un tiempo de llegar aquí, para averiguar sus conocimientos del la ciudad donde vivía. No era nada baladí, eran mirados con lupa y exigían y valoraban las ganas de aprender y el examen de conocimientos también de Cataluña en este caso y España. Por ejemplo: conocimientos geográficos, ríos, históricos, etc.., como en el colegio.
Fotografía: Fuente Internet
Mucho dependía del funcionario que te tocara, eso era sabido. Llegaron a casa se despidieron ya con el beso de rigor, pero como si fuera un pico, bueno de momento se conformaría con eso, pero en este tema se tenía que avanzar un poco. Pasaron dos días y Ousmane recibió una llamada de Lidia, que le hizo varias preguntas, desde luego nunca había cuidado de una persona mayor, pero más era hacerle compañía, la cama, comida-cena y salir a pasear con él, la suerte es que se valía por él mismo y si tenía que hacer alguna gestión acompañarle. Él le dijo que estaba de acuerdo con el empleo sería de 8 a 18 horas de la tarde, Todos los días, exceptuando el domingo, ya que tenía familiares que le podían acompañar. Acordaron el salario y sobre todo que le daría de alta en la Seguridad Social. ¿Puedes comenzar, mañana mismo? Le dijo, sí. Yo te acompañaré hasta su casa y allí hablaremos personalmente con él ¿de acuerdo?. Sí de acuerdo. Se verían mañana a las 09:00 am. y le facilitó la dirección de encuentro. Sé puntual, le remarcó. Sí, claro! Nada más colgar comenzó a dar saltos y bailar, bailes africanos llenos de fuerza (menos mal que se encontraba en casa). Y por supuesto llamar a Lucía y a Oscar para darles la buena noticia y las gracias.
Continuará....
Manuela García 03/04/2020
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