Fotografía: Manuela García (por la mañana)
Hoy se cumple el día 50 de confinamiento por Covid19.
Cincuenta días en cada hogar con mil y una historias que
contar, cuántos momentos de soledad compartida, de no hablar,
de tener la paciencia con uno mismo y los demás.
De inventar modos de entretenerse, de calmar la ansiedad,
de escuchar necesidades, de amoldarse, de valorar
las pequeñas cosas y las que no son tan pequeñas, de sonreír,
de mirar atrás, de chocar con sentimientos en la cercanía del hogar.
De que ha veces vives con un desconocido, y lo sabes ahora.
De malos entendidos, de mal humor, de discusiones,
también de emociones, un encierro en el que te puedes enamorar,
parece increíble, pero es verdad.
De ilusiones, de anhelos, de cosas por comenzar, cosas que no queremos
y las que queremos también, no somos perfectos ¿quien lo es?.
De hacerse preguntas y encontrar las respuestas.
De lágrimas, de deseos, de amigos que se van.
De la vida, de vivírla en plena libertad.
De qué con poco, se hace mucho,
de que no hace falta tanto, de escuchar de verdad.
De ser más humildes, de tener más humanidad,
de mirar al prójimo, sin prejuicios, ni juicios,
de no ver el color de la piel, todos somos iguales.
Sentimos, sangramos, amamos, comemos
y tantas cosas más que hacemos, no nos distingamos.
De ser persona, de no mirarse el ombligo,
de que no estamos solos, de que formamos
parte de un todo, no existe la separación.
De la separación nos encargamos nosotros,
el ego, los juicios previos, las expectativas,
de mirar por encima de la persona,
de no considerarla, ni persona.
No sé de esta experiencia que se ha aprendido,
cada persona, es un mundo. Un mundo de colores,
de grises, de blancos y negros.
Ahí está la riqueza y el aprendizaje.
Confío que al menos en mi, algo se ha transformado.
Salgo de este embate, más fuerte,veo aún mejor
mis carencias, pero también mis fortalezas.
He aprendido, que tengo mucho que aprender.
Y hoy sentí gran alegría porque el la Fase 0
puedes hacer deporte de 20 a 23 horas.
En mi caso es caminar, he llegado a Pºde Gracia
y vuelta atrás.La Gran Vía era una marabunta
de personas con ganas de volar, el deporte una excusa,
la verdad es el ansía de libertad.
Manuela García 02/05/2020
Vivencias por confinamiento por Covid19
Fotografía: Manuela García ( por la tarde y con agujetas)
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